Desiderata sobre mi Fe.

Jesús-el Cristo. En mi concepto y no por nada, he tratado de justificar ante mi mismo mi fe, es decir desde que tengo uso de razón he creído ciegamente en el Jesús de Nazaret y también en el Cristo, en algunas ocasiones por mi curiosidad por develar a este misterioso Ser, he estado al borde de no creer, he leído decenas de historias que lo desvirtúan y de verdad les digo: si 
no hubiese existido...que?


Es acaso el Sermón de la montaña dañino para alguien? o ¿es que promueve el odio por los demás o por la naturaleza? ahora lo identifico como un Ser superior, no solo por sus consejos si no también por su ejemplo, ¿que si su proveniencia es divina? o ¿que nació de una virgen? al final que importa, el asunto es que de seguir su ejemplo no tendríamos que vivir como unos tristes miserables víctimas de ego, soberbia, orgullo y todas esas emociones humanas que no nos llevan mas que a la desesperación de dejar toda nuestra consciencia de lado, de recomendar prácticas orientales, que yoga, que tantra, que meditación, que ley de atracción, que zen y quien sabe que mas cosas, todo se resume en simples actitudes recomendadas por este extraño Ser!


Ahora cambiemos el enfoque y pensemos que además de ser una persona común como todos nosotros fuese un ser de luz (para los que creen en eso) un Ser del mas allá, es decir de fronteras de las cuales no tenemos consciencia, de las que no podemos ver... como el aire o el cariño de nuestros hijo o padres, o amigos o pareja, un ser que ya vivió nuestras experiencias, que ya entendió que el estar atados a la carne nos hace nocivos para nosotros mismos y para los demás, pero que a su vez entiende que todas nuestras experiencias nos conducen de una u otra manera a vivir un calvario para entender que lo que sufrimos, también pueden estarlo sufriendo los demás, que somos uno... El y nosotros, que el truco es simplemente ver en el otro nuestro propio sufrimiento, nuestros errores, nuestros esfuerzos por ser mejores, por cambiar, por saber, por perdonar, por olvidar, por recordar... pero que a veces nos falta algo, algo que no podemos controlar, decidir, demostrar, cumplir, hacer... que probablemente es Él, el puente que necesitamos, el camino que buscamos, el número que no entendemos, el sentimiento que no sentimos, la idea que aún no se manifestó, el milagro que no se dio, capaz que en nuestro básico existir no vemos que ahí esta la razón de vivir, de existir, de ser, de sentir, de creer que tal vez no somos la explicación del porque estamos aquí, si no que el estar aquí, es la extraña razón de ser, que hemos elegido todo esto, nuestras penas, alegrías, experiencias, ansiedades, para volver a encontrarnos mediante estas falencias con nosotros mismos... que en un momento por medio del ego dejamos de ser UNO SOLO, el complemento.


El destino final, no es necesitar de nadie, porque éramos completos, todos juntos disfrutando de la eternidad, o mejor dicho de la compañía eterna de nosotros mismos, sin envidias ni separación, sin dolor, sin olvido, sin temor... que tal que Jesucristo sea la parte que nos falta, la que no encontramos, solo porque estamos buscando afuera donde no hay nada que en realidad nos llene, algo que es nuestro espejo, pero del mismo lado, no al revés, sino del mismo lado, del mismo partido, el mismo equipo, el mismo sentir. Que tal que sintiéramos que no estamos divididos, que no hay lucha, enfrentamiento, que podemos compartir y al hacerlo, no dividimos, sino que juntamos, que avanzamos, que llegamos, que entendemos al otro, que fructificamos y ese fruto es trascender, trascender al cuerpo, a la carne, que evolucionamos, que nuestros objetivos son mas, mas que tener, que poseer, que ostentar, que envidiar, que lo mejor es lo mas fácil, lo mas natural, que lo mejor no es mejor, solos ES.


Quiero dejar sentado el precedente de que como muchos he abdicado a todos y cada uno de los "pecados capitales” (errores), de los que puede ser víctima un ser humano, en cuerpo y mente, he causado mucho sufrimiento en mucha gente, pero hoy reconozco que no he sido solo yo, que he estado acompañado de extraños sentimientos que no reconozco como míos, pero se han hecho manifiestos a través mío y de los cuales no me siento ni responsable, ni orgulloso, solo se que han provenido de mi ser, por lo menos del que creo ser, todo esto antes mencionado me hace pensar que si de alguna forma erré, no me siento orgulloso de eso, solo quisiera decir: que si he fallado de tal manera, alguien pueda cargar con mis deudas porque yo no!, se que he fallado, pero también se que muchos de esos actos no reflejan mi intención, declaro que si hay alguien que pueda cargar con mis culpas, quisiera que fuera ese SER en el cual ahora, después de muchas deliberaciones de mi intelecto, se encargara sin ninguna razón de exculparme e impedir que vuelva a hacerlo.


No es que quiera abandonar mi responsabilidad por lo hecho, es que a veces no entiendo porque lo hice y lo sigo haciendo, lucho constantemente por cambiar...pero no puedo, soy consciente de lo hecho y no me gusta, pero lo hago y no se porque, solo quiero dejar constancia de que me arrepiento y no por eso dejo de amar el ser que soy, solo se que puedo ser mejor, y quisiera que si alguien me guíe por mejor camino, que ese, sea un SER del que no hay equivocación en su proceder y creo que ese SER el Jesús de Nazaret que por alguna razón se transformó en el CRISTO de nuestra era. Desde siempre lo designe como mi salvador, con razón o sin ella, yo creo en ÉL. Namasté.

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